Sea Towers

Las dos torres que componen el proyecto tienen en las cubiertas terrazas verdes accesibles para proveer a las personas de espacios diarios de bienestar y relax, con vista de 360 grados al mar y a la ciudad. Además, la presencia de huertos urbanos de estación en esta área permite que los usuarios estén en relación directa con el cuidado de la naturaleza. Toda la vegetación de los edificios es autóctona y de bajo consumo de agua. Las cubiertas tienen una parte destinada a ubicación de placas fotovoltaicas, pero el hecho de ubicar en fachada un porcentaje elevado, ha permitido disponer del resto de la superficie para uso de los inquilinos del edificio. El complejo Sea cuenta con medidas para fomentar el transporte sostenible como parkings preferentes para vehículos eléctricos y lugares para bicicletas que contribuyen con una ciudad inclinada a ser más amigable con el medio ambiente. Un área pública en el centro de manzana dota al barrio de un pulmón verde y a los vecinos un espacio de socialización y bienestar. Todas estas medidas hacen que el proyecto haya obtenido al certificado LEED Platinum y Well Gold, gracias a que proporciona importantes ahorros energéticos, en torno al 52%, y de agua, alrededor del 66%.

Sobre los dos volúmenes blancos de los edificios se aplica una segunda piel en las plantas inferiores para coger la escala de la preexistencia industrial. Las lamas de esta segunda piel están colocadas perpendiculares a fachada de calle o paralelas al tresbolillo con el edificio vecino, dando privacidad al mismo.

Diáfanas y adaptables, las diferentes oficinas de Sea Towers están pensadas para diseñar los espacios según las necesidades de los inquilinos. Cada una de las plantas es divisible en 3 entidades a fin de albergar a 3 posibles inquilinos y poderse adaptar con flexibilidad no solo a las necesidades actuales, sino las del futuro.

Mejor Actuación Inmobiliaria No-Residencial, ASPRIMA-SIMA premio.